Sellar una terraza vieja sin realizar obras importantes es totalmente posible si se utilizan los métodos y materiales adecuados. En VDV Inmobiliaria te ofrecemos una guía práctica para proteger tu terraza de filtraciones, humedades y posibles daños estructurales, manteniendo su funcionalidad y estética sin necesidad de levantar el suelo.
El primer paso consiste en preparar la superficie. Aunque no vayamos a levantar el pavimento, es esencial limpiar a fondo la terraza retirando polvo, restos de suciedad, pintura antigua o cualquier residuo que pueda impedir la correcta adhesión del impermeabilizante. El uso de agua a presión puede facilitar esta limpieza, especialmente en terrazas con incrustaciones o suciedad acumulada.
A continuación, revisa juntas, grietas y desagües. Estas son las zonas más vulnerables, y sellarlas correctamente es fundamental para garantizar una impermeabilización eficaz. Evalúa el tamaño de las grietas y utiliza un sellador adecuado o una pasta de relleno antes de aplicar el impermeabilizante principal.
Para impermeabilizar sin obras, existen varias opciones. La pintura impermeabilizante es ideal para terrazas con tránsito moderado y ofrece protección durante 3 a 7 años. Aplica varias capas: primero una más líquida para penetrar en grietas y juntas, y luego una más espesa para cubrir toda la superficie. Otra opción son las láminas flexibles de EPDM o PVC, que se colocan sobre el suelo existente usando cemento cola. Estas láminas se adaptan a la dilatación de la terraza y ofrecen protección duradera de hasta 25 años, sin necesidad de retirar las baldosas antiguas.
No olvides reforzar zonas críticas como esquinas, juntas y desagües con bandas autoadhesivas impermeabilizantes, ya que son los puntos más propensos a sufrir filtraciones. Además, realiza una prueba de estanqueidad antes de finalizar el trabajo: tapa los desagües y acumula agua durante 24 horas para comprobar que no haya filtraciones hacia el piso inferior.
Finalmente, deja que el producto se seque completamente antes de utilizar la terraza. Si usas pintura o láminas flexibles, un mantenimiento periódico prolongará la protección. Elegir el método adecuado dependerá del estado del suelo, el clima, el tránsito de la terraza y el presupuesto disponible.
Con esta guía práctica, sellar una terraza vieja sin obras grandes es una tarea accesible, eficiente y duradera. Siguiendo estos pasos, tu terraza estará protegida, funcional y lista para disfrutar durante años, evitando humedades y posibles daños estructurales sin necesidad de complicadas remodelaciones.
